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#3:
Pero esto era antes de la existencia de redes sociales.
Ahora de las idioteces que dice el idiota del pueblo se enteran hasta en Pernambuco y, lo que es peor, es que mucha gente se cree esas idioteces y las va repitiendo y repitiendo hasta que crean un efecto bola de nieve que te acaba impactando en toda la cara.
Ahora de las idioteces que dice el idiota del pueblo se enteran hasta en Pernambuco y, lo que es peor, es que mucha gente se cree esas idioteces y las va repitiendo y repitiendo hasta que crean un efecto bola de nieve que te acaba impactando en toda la cara.
#2:
Esos pelos...El video que inspiro a Trump, Boris, Milei...
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Pero esto era antes de la existencia de redes sociales.
Ahora de las idioteces que dice el idiota del pueblo se enteran hasta en Pernambuco y, lo que es peor, es que mucha gente se cree esas idioteces y las va repitiendo y repitiendo hasta que crean un efecto bola de nieve que te acaba impactando en toda la cara.
#3 Es verdad. Necesita actualización.
Esos pelos...El video que inspiro a Trump, Boris, Milei...
¡Que tiempos aquellos cuando solo había un tonto del pueblo!
#5
voto sí.
Salvando las distancias aquí hubo una versión patria.
pd: güenisima también por cierto.
Aquí les damos carguitos, altavoces y prebendas y cuentan con legión de seguidores e imitadores.
#1 Allí también, más que aquí me atrevería a decir.
#1 Mira el final del video, los idiotas de ciudad
¡Joder, brutal! Lo que me he reído diormío
La paradoja es que esto ya lo explicó alguien muy sabio llamado Umberto Eco y toda una legión de subnormales apareció por aquí para denostarle y echarle a la hoguera digital. Pero lo peor no es eso, lo peor es que toda esa basura no es capaz de entender que son sólo eso: pura basura intelectual. Y que el equivocado no era Eco, sino ellos.
Ve a los hilos de cuando Eco dijo aquello y te echaras unas risas viendo lo hipócritas e ignorantes que pueden ser los imbéciles (la mayoría de los cuales no son conscientes de que lo son).
https://x.com/textos_info/status/1260686924236369920
#10 Yo añadiría que el problema no radica sólo en que hablen, sino en que se creen con derecho a callar a otros con mayor conocimiento, experiencia e interés en la materia tratada que ellos, porque consideran que el derecho de expresión es derecho a confrontar y callar a otros en igualdad de condiciones, sin, por supuesto, esforzarse lo más mínimo en saber de qué se habla. En definitiva, consideran su "derecho de expresión" como excluyente al derecho de expresión de los demás, terminando en una falsa dialéctica sustentada en falacias lógicas y que no llega a nada ni aporta nada constructivo.
#12 Tal cual dices. Es inaudito que un imbécil que no ha abierto una mísera página sobre algo crea tener la misma autoridad que alguien con 30 años en una materia. Pero peor aún es el hecho de que ese imbécil no se dé cuenta, ni pueda, de que es imbécil. Por eso siempre me ha parecido fascinante el estudio de Dunning-Kruger, que realmente se tomó por algo de locos cuando tiene una base que, por mera experiencia, está clarísima que es real.
Limpiar las sociedades de esos imbéciles debería ser fundamental. Por higiene de lo justo. El problema es que muchísimas plataformas digitales, con venture capital detrás, ganan gigantescas sumas con ese capitalismo de imbéciles para imbéciles. De otra forma, ganarían menos. He ahí la paradoja esencial.
#10 Eco recibiendo el eco de sus invectivas.
Primero describe el oficio tradicional de idiota como tonto de pueblo para al final asimilarlo a lo que hoy aquí sería un pijo cayetano con fachaleco.
Aquí también se levantan a las 6 para entrenar. Incluso una hora antes.
Acojonante!