Hace 6 años | Por BBE a revistavanityfair.es
Publicado hace 6 años por BBE a revistavanityfair.es

Hay una historia aérea tan curiosa como ahora casi olvidada, relacionada con el turismo de los sesenta en las islas Baleares. Es tan chic como exótica y une indirectamente a Sean Connery con Mallorca como a Audrey Hepburn con Aviaco. Es la historia de los aviones Carvair, unos Douglas DC-4 modificados para el transporte de pasajeros con sus coches. Con ellos, entre 1964 a 1968, los viajeros volaron junto a sus utilitarios desde la península o Francia hacia una paradisiaca Mallorca.