#7 eso mismo he pensado yo. Si el niño es capaz de mandar la pelota a lo del vecino, también tiene que ser capaz de saltar el muro.
Que yo recuerde, mi padre nunca tuvo que colarse en ningún patio, balcón, piso en obras, etc… Siempre lo hacíamos nosotros.
Obviamente ahora toca vengarse y asustar al vecino con “cosas paranormales”
(Porque entiendo que el vecino malo de la película es el que denunció)
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#11 lo interesante sería saber cuántos camareros, fontaneros, etc…quedarían una vez casi nadie tenga trabajo, es decir, tengan todo el tiempo del mundo para aprender fontanería, albañilería… Seguramente habría menos negocio.