Hola, soy Manolo, el hurón.
Quiero dar las gracias a todas las muestras de apoyo que he recibido estos días. Ayer, con nocturnidad y alevosía, un grupo de terroristas me secuestró del que debía ser mi nuevo hogar. Me llevaron a un descampado y me hicieron cosas terribles, algunas creo que sexuales pero no quiero hablar del tema solo diré que las hembras humanas huelen fatal.
Después me dejaron ahí solo, sin comida ni ningún tipo de recurso. Ni siquiera unos euros para comprarme algo en el McDonald's. Pude encontrar algo en los contenedores que había por ahí. Les conté mi historia a las ratas y después de cantar a la amistad y no sé que mierdas al estilo Disney me han dicho que me ayudarán a vengarme. Son como 30 ratas y yo. Suficiente para descuartizar a mordiscos a esas delincuentes.
Lo siento, soy un animal salvaje, lo hubieran pensado antes.
Si esta tendencia sigue quizas se tendrian que replantear tomar medidas.
Creo que hubo un debate en madrid acerca del puente segovia y finalmente instalaron pantallas protectoras.
Esto dice el presidente de Fundación para la prevención del suicidio sobre esas pantallas.
https://www.epe.es/es/cultura/20230502/viaducto-segovia-suicidios-86577071
La prevención —ya sea en forma de pantallas protectoras o de teléfono de atención— funciona, continúa el presidente de la fundación. "Cuando se instalaron las pantallas no desaparecieron los suicidios por completo, pero sí disminuyeron. Suele pensarse que la persona que quiere quitarse la vida lo hará de otra manera, pero hay evidencia de que cuando limitas el acceso o pones medidas de disuasión en puntos negros disminuyen los suicidios. No evitas todas las muertes, pero sí las reduces. Además, en este caso concreto, sirvieron para que los vecinos no vieran tantos suicidios cada mes". Ansean pone el ejemplo de otro punto negro reciente de Madrid: las escaleras del Caixafórum, donde tras dos suicidios (en 2019 y 2021) se puso un vigilante de seguridad.