@ElenaCoures1 En realidad llevo aquí mucho más, aunque sin usuario registrado. Ya he dicho mil veces que detesto las redes sociales. Tengo un Facebook muy privado y sólo con verdaderos amigos, una cuenta en Quora, ésta de Menéame, y últimamente la de Twitch (para poder comentar las cosas de Menéame). Precisamente me registré porque aquí se podía hablar y se podían leer cosas muy interesantes. Yo vengo de foros y canales de IRC muy temáticos donde había respeto, educación, etiqueta y buena conversación.
En 2016 Menéame tenía ese toque molesto de redes sociales de ruido, pero era soportable y corriente. Pero desde la explosión de Twitter, sobre todo de la prensa tuitera, los grupos de presión, la aparición de influencers y youtubers, la agitprop de consumo rápido y los canales de mensajería instantánea de memes y bulos, sumado a la muerte de los blogs y la omnipresencia de dispositivos móviles, este sitio ha ido empeorando. Incluso usuarios antiguos que reservaban su mala baba para Twitter ahora lo hacen aquí.
Y parece que desde que Musk compró Twitter, sus usuarios hardcore han ido trasladando sus guerrillas aquí, como si ésto fuese una especie de Twitter naranja.
Por varias cosas.
1. Tiene muchos recursos que le dan cierta autonomía en u
2. Porque las plutocracias basadas en la adoración al divino líder son inmunes a muchas cosas, entre otras cosas, a las auditorias y a los controles internos.
3. Se puede gastar un sin fin de recursos que debería destinar en otras cosas para mantener su economía de guerra y no tener líos con la oposición ni a tecnócratas diciendo que no hay para pagar pensiones, salud y si hay millones con la salud afectada en Rusia o hay millones que perdieron su empleo no nos vamos a dar cuenta... Ni los propios rusos no se van a dar cuenta.
4. Porque China está haciendo su gran temporada en Rusia, se está asegurando un sin fin de recursos, tiene a Rusia debiendole mucho y ha logrado que Rusia tenga un mercado cerrado dónde tendrá mejor precio por cosas que Europa pagaba muy caro a Rusia y ya no.